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Oftalmoscopía

La oftalmoscopía es el exámen del interior del ojo. Su principal estructura de interes es la retina o, mejor dicho, el fondo de ojo como un todo. Es un procedimiento no invasivo y indoloro. El paciente puede sentir apenas una pequeña moléstia causada por la intensidad de la luz proyectada sobre sus ojos.

Para una correcta evaluación de toda la porción posterior del ojo, muchas veces es necesaria la dilación de la pupila. Para ello, se utilizan colirios midriáticos, los cuales logran una buena dilatación pupilar luego de aproximadamente 10 a 30 minutos de instilada la gota. Su efecto puede permanecer por cerca de 6 a 8 horas.

Existen, básicamente, dos formas de realizar  la oftalmoscopia, la forma directa y la forma indirecta. Ambas son complementarias una a la otra. En el Centro Oftalmológico Veterinario, contamos con un oftalmoscopio directo y un oftalmoscopio indirecto binocular para promover un estúdio más completo del fondo del ojo. Una cámara acoplada al oftalmoscopio indirecto, nos permite, también, gravar imágenes en tiempo real durante el estudio.

Oftalmoscopía directa

El oftalmoscopio directo, así es llamado por proporcionar una imagen real y directa.

Posee un reostato, que nos permite controlar la intensidad de la luz; filtros coloreados; un haz en hendidura para determina depresiones o elevaciones en el fondo del ojo y una rejilla iluminada que se puede proyectar sobre el fondo del ojo y que permite estimar el tamaño de lesiones.

Además, posee una serie de lentes, con diversos aumentos, que podemos intercambiar de manera sencilla durante el mismo examen. Esto nos permite evaluar diversas profundidades dentro del ojo.

Posee una mayor capacidad de magnificación que el oftalmoscopio indirecto, lo que facilita evaluar, en detalles, determinadas áreas de nuestro interés.

Oftalmoscopía indirecta

El oftalmoscopio indirecto, lleva este nombre porque la imagen que nos brinda es virtual e invertida.

Este equipo nos proporciona una menor magnificación que el oftalmoscopio directo pero, a su vez, un mayor campo de visión. Por lo tanto, la oftalmoscopia indirecta nos permite explorar una mayor extensión del fondo del ojo. Esto nos da la gran ventaja de poder examinar a un mayor número de estructuras del fondo del ojo al mismo tiempo.

Durante este examen utilizamos, además, una lente convexa de 20 a 30 dioptrías (aumentos).